La Fibromialgia y Fatiga Crónica mejora con la ozonoterapia.
Cuando hablamos de Fibromialgia (FM) o síndrome de fatiga crónica (SFC) muchas personas aún no saben que es o tienen una idea muy distorsionada de la realidad.
Por desgracia nada nuevo diremos sobre lo que éste padecimiento es para los afectados, ni para sus familiares o amigos cercanos.
Lo que si podemos asegurar es que los pacientes diagnosticados de Fibromialgia y Síndrome de Fatiga crónica que ya se han tratado o están tratándose con Ozonoterapia experimentan una gran mejoría, una mejora real, lo que es una gran opción para salir de un estado, en algunos casos, «caótico» para muchas personas y su entorno familiar y laboral.
Para los que desconozcan dichas enfermedades, diremos que la Fibromialgia es una enfermedad debilitante, en muchos casos incapacitante y demoledora por los múltiples dolores y alteraciones que produce en el cuerpo, mente y vida de las personas que la padecen, además del cansancio extremo que la acompaña.
La Fibromialgia es una enfermedad que padecen más mujeres que hombres. El porcentaje es de un 90% de mujeres diagnosticadas contra tan solo un 10% de pacientes diagnosticados hombres, lo que no quita que los hombres también la padecen, aunque con algunas diferencias en los síntomas, por lo que también deben ser tenidos en cuenta.
No olvidemos que es una enfermedad crónica, con brotes elevados de dolor y otros brotes de dolor de menor intensidad pero siempre está ahí. La enfermedad acompaña al afectado 24 horas al día los 365 días del año.
Síntomas Fibromialgia
- Dolor generalizado y rigidez muscular
- Dolores de cabeza
- Dolor de cuello
- Disfunción de la articulación Temporomandibular (TMJ)
- Trastornos digestivos
- Problemas genitourinarios
- Disfunción eréctil
- Síndrome del dolor miofascial
- Costocondritis
- Desequilibrio
- Alergias
- Síndrome de las piernas inquietas
- Hinchazón (manos, pies, rodillas) no asociadas con artritis
- Depresión y ansiedad
- Hipersensibilidad sensorial
- Trastornos cognoscitivos
Síntomas Fatiga Crónica
- Fatiga profunda y persistente (se agrava después del ejercicio físico o mental)
- Dolores musculares
- Dolor de cabeza
- Irritabilidad
- Fiebre leve: 101°F (38.3°C) o menos
- Debilidad muscular
- Dolor de garganta
- Sensibilidad en los ganglios linfáticos del cuello o la axila
- Dolor articular pero sin hinchazón ni enrojecimiento
- No sentirse descansado después de haber dormido suficiente tiempo
- Falta de memoria
- Problemas para concentrarse
- Confusión
La persona afectada de fibromialgia deja de hacer un gran porcentaje de las cosas que hacia antes de padecer esta enfermedad, produciéndole un estado de culpa, ansiedad y confusión en muchas ocasiones y entrando poco a poco en una depresión a causa de la situación desesperante, pues pueden pasar meses incluso años para el diagnóstico definitivo de estas patologías.
Después toca la aceptación de las mismas y en muchos casos es un periodo de asimilación muy largo por la No aceptación, el rechazo a las mismas, ya que se da el caso que la mayoría de estas personas antes de enfermar eran personas muy activas, perfeccionistas e incansables y sin previo aviso les ha llegado una enfermedad para quedarse definitivamente y cambiarles la vida (en principio a peor).
Parte del diagnóstico de la Fibromialgia (FM) se caracteriza por unos puntos llamados gatillo que están distribuidos por varias zonas del cuerpo. Cuando se ejerce una presión sobre estos puntos el paciente siente un dolor desproporcionado al que sentiría una persona sin esta patología.
El dolor se difumina por todo el cuerpo y la intensidad y la zona dolorida puede variar según el día, incluso en horas.
El síndrome de Fatiga Crónica (SFC) se caracteriza por la falta de energía. Un cansancio extremo con sensación febril y también acompañado de algunos malestares generales.
Muchas personas afectadas con fibromialgia también padecen SFC la combinación de ambas hace que el afectado/a tenga una vida muy pasiva y eso contribuye a que aún empeore la enfermedad porque al no generar movimiento no se segregan endorfinas y eso hace que el cansancio se agudice más, por lo que es como la pescadilla que se muerde la cola, entras en un circulo vicioso aparentemente sin escapatoria. Ésta situación hace que el enfermo entre en un estado de ansiedad y posterior depresión.
El tratamiento con Ozonoterapia va ayudar al respecto mejorando el dolor muscular y articular.La oxigenación que va a producir el tratamiento de ozonoterapia sobre el paciente le va a proporcionar un mayor grado de energía.
A veces cuando un paciente afectado ha fracasado en muchas terapias, ha gastado tiempo, esfuerzo y dinero, entra en un estado depresivo y pasivo del que cada vez es más difícil salir y eso desemboca en que la enfermedad se acentúe y empeore por lo que el tratamiento con Ozonoterapia es el gran aliado para sacar al enfermo de ese estado, aportando energía y saliendo poco a poco del circulo antes mencionado.
Una vez empezado el tratamiento de Ozonoterapia, el paciente empieza a sentirse mejor, más energético y es aconsejable empezar en ese punto más optimo de energía a realizar algunos ejercicios adecuados para mantenerse activo. Lo más indicado en estos casos son los ejercicios suaves y preferiblemente en el agua, tipo aquagym o también denominado fitness acuático, esta técnica evita posibles lesiones y el impacto en nuestros músculos es muy leve.
¿Cómo realizamos el tratamiento con ozonoterapia en enfermedades reumáticas?
Se realiza por vía subcutánea aunque también se administra de forma intrarticular y endovenosa.
Cada paciente es diferente y los tratamientos deben ser personalizados por lo que lo adecuado es hacer una valoración personal.
En definitiva, la ozonoterapia aumenta la oxigenación, controla el exceso de radicales libres, disminuye el dolor y la inflamación, mejora la circulación sanguínea y aumentan los niveles de serotonina mejorando el estado de ánimo del paciente.
¿Quiere mejorar su calidad de vida con la ozonoterapia?